Bienvenidas hayan logrado o estén encaminadas a lograrlo, queridisimas bestias paranoicas y piratízimas que se atreven a embarcarse en este su bucanera embarcación de Eclectomeiroland Paranoias para Piratones Edición 203 que tratará de resucitar vuestras neuronas estés donde estés, en estos días se ha evidenciado el pésimo uso de recursos por parte de la administración tanto Federal, como Estatal y Municipal para la realización (si se le puede llamar así a lo que hacen) de obra pública pues son ya muy numerosos los colapsos estructurales a lo largo y ancho de este remedo de país, siendo el más sonado el caso de la autopista en Morelos que fue responsable de dos muertes, el desplome del tan cacaraqueado tren rápido Toluca-Ciudad de México, sin restarle importancia a los numerosos cráteres que aparecieron por casi todas las ciudades. Pero, hablando de la ciudad de Hermosillo, Sonora, México, tenemos a la, ya siempre presente dinastía de híper-mega-baches de la Avenida Luis Donaldo Culosio que no faltan en cada llovida que llega a caer en esta assholeada ciudad, pero la respuesta que las autoridades y ciertos medios nos brindan con su infinito carisma apenas llegan a dieciseisavos con las siguientes declaraciones.
